Boicot a los peces de la pesca eléctrica!
Filetes equipados con electrodos… Para desalojar peces planos, como el lenguado, enterrados en el fondo del mar, no hay forma más eficaz que la pesca eléctrica, es lo que nos recuerda Maud Fontenoy.
Electrodos, emiten pulsos que electrifican al pez, lo aturden y lo hacen despegar del fondo. Una ganancia inesperada para la siguiente red y un ahorro de tiempo y energía para los navegantes y su barco. Por ejemplo, en los últimos diez años, la pesca no convencional ha causado revuelo en la mitad meridional del Mar del Norte.
Sin embargo, esta práctica está prohibida en Europa desde 1998 (como en Estados Unidos, Brasil o China) para preservar el recurso. Sin embargo, contrariamente a todas las expectativas, esta prohibición se ha beneficiado de excepciones desde 2007,”con carácter experimental”. Por ejemplo, los países ribereños de la masa de agua en cuestión han obtenido el derecho a equipar el 5% de sus buques con redes provistas de electrodos experimentales.
Pruebas que tienen mucho éxito porque, aparte del hecho de que no se ha llevado a cabo ningún estudio real, parece que hasta la fecha, según las ONG, más del 25% de los arrastreros de varas holandeses están equipados con ellos. Estos últimos argumentan, naturalmente, a favor de un arte de arrastre menos nocivo desde el punto de vista ecológico. La maniobra impediría a los pescadores fregar el suelo con cadenas que destruirían los ecosistemas.
Además, estos barcos consumirían un 50% menos de fuel oil. Recientemente -una noticia alarmante para los defensores de la vida marina-, la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo votó 23 a 3 a favor de un posible desarrollo de la pesca eléctrica y confirmó el principio de extender esta técnica a otras especies de peces más allá del Mar del Norte y más allá del límite del 5%.
Por supuesto, el Ministro francés de Agricultura y Pesca, de acuerdo con los pescadores franceses, solicitó inmediatamente que se mantuviera la normativa vigente sobre pesca eléctrica. Los pescadores de Hauts-de-France acaban de ser unidos, en su lucha por Europa para rechazar la ampliación de esta pesquería, por la asociación Poissonniers de France.
Por ello, este grupo de 6.400 profesionales decidió “boicotear todos los productos del mar comercializados por las naciones que autorizan la pesca eléctrica”. Las cadenas de supermercados “Intermarché” también acaban de anunciar su decisión de dejar de vender productos de pesca eléctricos. Así que, ¿cuántos de nosotros pediremos que se lleven a cabo estudios por fin?
No se puede permitir que los Estados hagan trampa y/o abusen de un derecho so pretexto de experimentación, ni tampoco pueden autorizar una técnica sin tener, desde hace casi diez años, el más mínimo estudio sobre su impacto en el recurso pesquero en general, y en particular en los huevos, los juveniles, o incluso en especies electrosensibles como las rayas o los tiburones.
Fuente : blog de Maud Fontenoy